Las multitudes de jóvenes musulmanes quemaron y saquearon
iglesias en la ciudad etiope oriental de Jijiga el sábado 4 de agosto, según la
agencia de la iglesia perseguida, Barnabas Fund. Tres iglesias
protestantes fueron saqueadas y la iglesia ortodoxa etíope fue incendiada.
Los partidarios del presidente
regional, Abdi Mohamoud Omar, tomaron las calles, atacaron iglesias y también
según los informes, los hogares de algunos grupos étnicos no somalíes y
principalmente cristianos.
La violencia
estalló luego de que las tropas del gobierno central etíope
ingresaron a la ciudad, que es la capital de una región somalí semiautónoma y
fuertemente musulmana y étnica. Según los informes, las tropas del
gobierno intentaron arrestar al presidente Omar, que se encuentra actualmente
en una disputa con el gobierno central por su trato a los grupos étnicos
minoritarios.
La región ha experimentado
violencia esporádica desde 1984, cuando el Frente de Liberación Nacional de
Ogaden lanzó una campaña para lograr la secesión de la región de la mayoría
cristiana de Etiopía. El brote de violencia más reciente tuvo lugar a
principios de la década de 2000, durante el cual hubo frecuentes ataques con
granadas en Jijiga y se plantó una bomba en una iglesia.
Fuente.
joeirizarrynoticiascristianas.com
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