Chandan Devi tiene 35 años, es madre de cuatro
hijos y acaba de enviudar. Su esposo, Aadarsh, un valiente predicador, fue
asesinado por 30 extremistas. A pesar de esto, la fe de esta mujer se ha
fortalecido y prefiere la muerte antes que renunciar a Cristo.
30 naxalitas entraron por la fuerza en la casa de Aadarsh y Chandan. Gracias a Dios, ninguno de sus hijos estaba en casa.
Lo arrastraron fuera de su vivienda, ella se aferró a él, pero la golpearon hasta
que soltó a su esposo, luego desaparecieron en la jungla con él. Unas horas
después, unos aldeanos encontraron en el monte el cuerpo sin vida de su esposo.
Aadarsh era pastor, se dedicaba a buscar vidas para Cristo,
especialmente a jóvenes, y amó a Dios hasta el día que los 30 naxalitas lo
mataron en aquel monte. Cristianos como él se oponen a este grupo que recluta
jóvenes y que, en los últimos 10 años, ha atacado, golpeado, secuestrado,
violado y asesinado a miles de cristianos en India.
La policía no pudo ayudar y los pobladores tenían miedo de
intervenir, por lo que Chandan tuvo que huir de la aldea con sus hijos. Una
semana después, el equipo cristiano Puertas Abiertas fue a llevarles consuelo,
comida y ropa. "Prefiero morir antes que abandonar a mi Cristo", les
compartió a los hermanos que la visitaron.
La pequeña comunidad cristiana a su alrededor sufre gran
opresión por parte de los naxalitas y otros grupos extremistas. Más de 63
millones de cristianos en India son perseguidos por su fe. ¡Por favor, no dejen
de orar por Chandan, su familia y por el resto de nuestros hermanos en India!
Publicar un comentario