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Fabio Schucman nació y creció en el judaísmo, pero su búsqueda de una relación personal con Dios lo llevó a conocer a Jesús, el Mesías de Israel, después de estudiar la Biblia durante 5 años con la madre de un amigo cristiano.

El lunes 26 de octubre, Fabio conversó con el portal brasileño Guiame, compartiendo parte de su testimonio y hablando sobre la Biblia, el judaísmo y el cristianismo. “Estaba totalmente involucrado en la comunidad judía y allí no tenemos pastor, sino rabino. [...] Al haberme criado en la comunidad judía, tenía muchas preguntas para los rabinos sobre cómo tener una relación más cercana con Dios”.

Fabio explicó que en la sinagoga, el valor de las liturgias es muy fuerte, todas se celebran en hebreo y esa fue una de las preguntas que lo llevaron, incluso a los 8 años, a cuestionar su propia religión. “Quería orar en portugués, pero los rabinos me dijeron que tenía que hacerlo en hebreo, para que 'las puertas del cielo se abran y Dios reciba mi oración'. Fue entonces cuando empezaron mis críticas al judaísmo”.

A pesar de sus muchas dudas, Fabio aún tenía expectativas sobre el rito de iniciación Bar Mitzvá. “Pensé que pasaría algo especial, pero nada de eso sucedió”, dijo. A la edad de 13 años se fue a vivir a la costa de São Paulo. Fabio comenzó a entablar amistad con un amigo cristiano y ese fue el comienzo de un largo viaje, en el que conocería al Mesías de Israel, ya que Neide, la madre de su amigo, estaba dispuesta a presentarle a Jesús.

“Esta familia empezó a hablarme sobre sus valores. Ellos tenían mucho conocimiento de las Escrituras y la mamá del niño me empezó a hablar mucho de la Biblia, hasta que un día me preguntó si me gustaría estudiar la Biblia con ella”, explica Fabio. Como Fabio se crió en el judaísmo, se negó a leer el Nuevo Testamento y Neide no vio ningún problema en estudiar el Antiguo Testamento con el niño.

“Yo, inocente, pensé que el Antiguo Testamento no decía nada sobre Jesús. Pero después de 5 años de estudiar conmigo, pude entender claramente que el Mesías de Israel profetizado en el Antiguo Testamento tenía que ser Jesús. A los 18 años, tomé la decisión de seguir a Jesús”, dijo.

Fabio dijo que su familia no reaccionó bien a la decisión que tomó y muchos de sus familiares y amigos terminaron alejándose de él. “Fue un gran shock, porque fui el primer judío en aceptar a Jesús en mi familia”, confesó. “Dios hizo mucho en mi vida y todo empezó a cambiar. Comencé a sumergirme en las Escrituras”.

Fuente: Guiame


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