Daryoosh Zareian era musulmán y vivía en Irán.
Cada mañana, antes de ir a clase, le hacían gritar: “¡Muerte a Israel!”. Le
habían enseñado a odiar a Israel y al pueblo judío. Durante su servicio militar
empezó a consumir drogas hasta volverse adicto. Sufría demasiado y se sentía
vacío, así que decidió irse a Inglaterra, sin imaginar lo que encontraría.
"Era un viaje muy arriesgado. Cuando
llegué a Inglaterra, solicité asilo. No tenía una buena razón. Solo quería
tener una vida mejor. Así que decidí mentirle al gobierno. En el formulario
escribí que era un cristiano perseguido”, explica Daryoosh. ¡Pero él no era
cristiano, era musulmán! Y como no sabía nada de la fe cristiana, decidió ir a
una iglesia para obtener información. Después de algunas reuniones, aprendió lo
básico de la fe cristiana.
Un día, el gobierno le citó, y llamó a su pastor para que lo ayude.
“Pero Daryoosh, ¡tú no eres cristiano! ¡Eso es mentira! Jesús pide que
permanezcas en la verdad, y la verdad te hará libre”, le dijo el pastor.
Daryoosh se llenó de rabia y, cuando el pastor se fue, le dijo a Dios: “Si de
verdad existes, ¡debes revelarte a mí ahora! ¡No puedo continuar!”. En ese
momento, Dios se reveló a su vida.
“Tocó mi corazón. Me liberó completamente
de las drogas y le entregué mi vida”, testifica Daryoosh. Cuando acudió a su
cita, decide decirle la verdad al funcionario y entró en juicio. En el
tribunal, el juez le dijo: “Sr. Zareian, ¿qué hizo ayer?”. “Les dije que había
dirigido el grupo de alabanza y que había leído el Salmo 96. En la corte, todos
abrieron la Biblia, ¡y leyeron el Salmo 96”, explica Daryoosh.
Salmo 96, 1 -
2
Cantad a
Jehová cántico nuevo;
Cantad a
Jehová, toda la tierra.
Cantad a
Jehová, bendecid su nombre;
Anunciad de
día en día su salvación.
Y allí hubo un milagro. El juez le dijo:
“Tienes derecho a quedarte en Inglaterra”. Desde entonces, Daryoosh ha podido
fortalecer su fe en Cristo y su corazón se ha inundado del amor de Dios, de su
boca solo salen palabras de bendición para Israel y de edificación para los que
le oyen. Actualmente, dirige el coro de su iglesia y anhela conocer más a Dios.
Fuente: impactoevangelistico.net
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