La
invasión rusa de Ucrania también ha interrumpido las importaciones de
alimentos, pues Rusia y Ucrania suministran en conjunto el 90 por ciento del
trigo para África oriental, sin mencionar que también es uno de los principales
exportadores de fertilizantes del mundo.
Los gobiernos del mundo han visto venir la sequía desde el año
2020, pero han hecho poco para ayudar.
Ante la problemática, los diferentes grupos de ayuda, incluidos
Oxfam y Save the Children, culpan a este fracaso político por permitir que la
crisis se agrave tanto. Discípulos Globales, ONG cristiana, trabaja con líderes
empresarios de la región para proporcionar ayuda alimentaria e inmediata a
través de un fondo de generosidad.
Simultáneamente, también han estado trabajando a través de varios
miembros del personal involucrados en Farming God ‘s Way, que es un método de
labranza cero para que las personas realicen agricultura manual en pequeñas
parcelas. Estos pequeños terrenos pueden cultivar plantas necesarias para la
alimentación incluso en épocas de sequía.
Los trabajadores de Discípulos Globales, también ayudan a las
comunidades a criar patos, recolectar miel o incluso administrar el agua. Según
Burkholder, representante de Farming God´s, esta sería una gran oportunidad
para impartir el evangelio a las personas pues están abiertas a escuchar las
Buenas Nuevas.
“Si podemos ofrecer técnicas muy simples que les permitan cultivar
un poco más de alimentos, también hay aceptación para el Evangelio”, concluye
Burkholder. Si bien es cierto, se rumorea sobre una posible hambruna mundial,
pero el pueblo de Cristo en África y otras partes saben y conocen que nuestra
vida depende del Dios que no improvisa. Dios es fiel.
Fuente:
Impactoevangelistico.net
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