Hace unos meses, después de un accidente,
Trenton McKinley, de 13 años, fue llevado al hospital y diagnosticado con siete
fracturas en el cráneo. Tuvo una muerte cerebral y tras pasar 2 meses en coma,
y sin ninguna esperanza de recuperación, su familia firmó los papeles para la
donación de órganos, pero de pronto Trenton resucitó, informó Fox News.
Estados Unidos y el mundo entero hablan de él,
lo llaman “el niño del milagro”. Luego de sufrir muerte cerebral, los padres de
Trenton, desgarrados de dolor, decidieron desconectarlo y donar sus órganos. Ya
habían firmado los papeles para la donación, querían que su pequeño Trenton
continuara viviendo de alguna manera.
"Murió un total de 15 minutos. Estaba muerto y cuando
resucitó me dijeron que nunca más volvería a ser normal, que las secuelas
afectarían severamente su cerebro y, si lograba sobrevivir, permanecería en
estado vegetal", relató Jennifer Reindl, madre de Trenton.
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Un día antes de que los doctores retiraran a
Trenton del soporte vital, comenzó a mostrar signos de actividad cerebral y
movimiento. El pequeño comenzó a respirar por sí mismo y se despertó hablando
frases completas: “Estaba en un campo blanco y abierto, solo respiraba paz,
estuve en el cielo”, contó Trenton.
Por otra parte, los padres e incluso los
mismos médicos mencionaron que se trataría de “un milagro”, asegurando que
detrás de este gran acontecimiento estaría la mano de Dios. Trenton todavía
deberá someterse a diversos tratamientos para su completa recuperación, pero
sabemos que Dios seguirá restaurando su salud.
Fuente:
impactoevangelistico.net
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